Has oído niños y te ha saltado la alarma? Imagino que no hay que explicarte lo que supone viajar con niños. Absorben toda tu atención y tu tiempo, por no hablar de la energía? Te cuesta encontrar planes para compartir con ellos? Afortunadamente, también hay actividades en las que podéis disfrutar vosotros y ellos al mismo tiempo y una de ellas son los paseos con raquetas de nieve.
La nieve gusta a todos, niños y no tan niños. Es cierto que cada uno encuentra la diversión en la nieve de forma distinta. En los paseos con raquetas de nieve los adultos disfrutamos de las vistas, los paisajes y el pasear por un entorno natural. Los niños en cambio lo ven todo con otros ojos. No se suelen sorprender tanto por la magnitud de las montañas que les rodean, van a cosas más sencillas como la textura de la nieve y los juegos que en ella se pueden hacer. Hacer un agujero en la nieve, una trinchera, un iglú… Encontrar un tesoro escondido bajo la nieve, hacer una guerra de bolas, deslizar por una ladera…este es el aliciente que los niños encuentran en la arena blanca, así que cuando hacemos una excursión para niños dedicamos más tiempo a estas cosas que a caminar, pues para ellos andar no es un objetivo. Tenemos que encontrar el equilibrio entre caminar y motivarles para que no se cansen, pues no nos engañemos, los niños tienen pila para rato y no cansan, se aburren. si están motivados son capaces de caminar horas.
En Pixel Vertical ofrecemos rutas con raquetas de nieve para niños y también rutas de iniciación para adultos en las que pueden participar los niños de 6-7 años en adelante. Para estas rutas recomendamos que el niño sepa que va a caminar 2 horas y que también podrá jugar en la nieve. Hay tiempo para todo.

Cuando planteamos una actividad para niños, la hora de comienzo suele ser más tarde. De esta forma os damos tiempo para que os levatéis sin prisa y así la temperatura también aumenta. Nos lo tomamos todo con mucha más calma, pues sabemos que el ritmo con niños es otro. No nos ponemos objetivos muy pretenciosos. Caminar un poco, encontrar un rincón tranquilo en el que establecer campamento y disfrutar allí de lo que la nieve ofrece. Uno de los juegos que más gusta es la búsqueda del tesoro. Para ellos utilizamos las herramientas que se utilizan en la detección de víctimas de avalancha pero en lugar de rescatar personas rescatamos “tesoros”. Lo mismo hacemos con la construcción de iglús. Algo que se utiliza para pasar la noche en situaciones límite, lo convertimos en juego. Para ello solo necesitamos palas y ganas de divertirnos. Y como en todo trabajo, no puede faltar la hora del almuerzo. Haremos un parón para coger fuerzas, recoger el campamento y volver a los coches después de una estupenda jornada “perdidos en la montaña”
Si viajas en familia y buscas un plan divertido para los días de invierno te recomendamos que nos llames para pedir más información sobre nuestras actividades de invierno. Seguro que podemos hacer una excursión chula en la que tanto padres como niños puedan disfrutar de todo lo que el Pirineo ofrece